La leyenda del topo de la catedral de León

La leyenda del topo de la catedral de León

La conocida como Pulchra Leonina está construida sobre otras construcciones anteriores, algunas de época romana como unas termas  y otros edificios públicos que la Legión VII Gémina había construido a en el siglo II, cuando tenía su campamento en este lugar, entre los ríos Torío y Bernesga.

Posteriormente sobre estos restos de fueron construyendo otros edificios posteriores a esa época, incluida una catedral románica sobre la que finalmente se construyó la catedral gótica actual finalizada en 1205.

Pero pocos conocen una leyenda bastante posterior sobre la construcción de una de las mejores catedrales góticas de España como es la leyenda del topo de la catedral de León.

El topo de la catedral de León

Cuenta la tradición sobre la leyenda del topo de la catedral de León, que tras varios derrumbamientos producidos en el edificio a lo largo del tiempo, se vio que eran necesarias algunas obras para evitar que la catedral se viniera abajo completamente.

Pulchra Leonina

Iniciadas las obras, estas tuvieron que parar durante 50 años y la Pulchra Leonina estuvo cerrada hasta 1901.

Los obreros, en lugar de culpar a los constructores de los fallos de la obra, acabaron por culpar a un topo gigante, que según ellos, destruía por las noches todo lo que los obreros levantaban por el día con lo que tenían que reconstruir una y otra vez todo lo que este topo tiraba.

Durante semanas, los maestros canteros no veían como no avanzaban en su trabajo, ya que no eran capaces de evitar las destrucción de su trabajo por este ser maligno

Le gente harta de retrasos en la obra, una noche decidieron quedarse esperando al topo y poner un cepo con la esperanza de capturarlo, espera que dio sus frutos y en el momento que apareció el topo, acabaron con el a base de garrotazos y lo dejaron allí mismo muerto.

Como aviso de lo que le podía esperar a otra gente o animales que entorpecieran o retrasarán la obra, colgaron el pellejo del topo en el interior de la catedral.

Y allí permaneció colgado en lo alto de la puerta de San Juan en agradecimiento a la virgen María hasta los años 90, momento en el que se decidió enviarlo a una exposición en Barcelona.

Fue en el momento de bajar el pellejo del topo de su ubicación, cuando se dieron cuenta que no era tal, sino la concha de una tortuga laúd cuyo origen no esta claro aunque podría haberse debido a una donación de algún peregrino.

 

Si buscas la leyenda del topo de la catedral de León en internet verás que hay varias versiones como en toda buena leyenda histórica, pero todas tienen el mismo argumento y causas sobre el mantenimiento continuo que tiene esta joya del patrimonio de todos los españoles.

La leyenda en video

Aún hoy en día, se siguen produciendo algunos desprendimientos y derrumbes lo que pone en peligro a quizás, la mejor catedral de España con sus impresionantes vidrieras, ¿Será que algún otro topo sigue haciendo de las suyas?

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