Indulto a la española, con fettuccine a la italiana

MR3ZOMDUWBDANFB4FML47F4MAI

Juana Rivas, esa feminista, –Bueno, llamemos a las cosas por su nombre– rectifico, feminazi, que fue apoyada por toda la hez periolista, así como toda la banda de politicuchos bolivarianos, dictadorcillos, titiriteros y planchabragas de la izquierda más extrema de Europa. Si si, la tal Juana, esa que secuestró a sus hijos arrancándoselos a su padre, al cual le quisieron aplicar la inconstitucional Viogen, pero pincharon en hueso, ya que es de nacionalidad italiana, y allí, «in Italia» aún hay leyes de entidad, democráticas e igualitarias. La susodicha fue condenada, ¡por supuesto!, por dicho secuestro. Resulta que tras breves meses en prisión después que en julio de 2018 la Justicia la condenó a cinco años de cárcel, seis de inhabilitación sobre la patria potestad de los niños y al pago de una indemnización. La sentencia fue confirmada en marzo de 2019. Pues va el gobierno y «Voilà», la indultan.

Pues bien, queda demostrado que la justicia no es igual para todos, ya que hay miles de hombres condenados, destruidos y con la muerte civil en sus espaldas por un supuesto delito cometido contra una ley, L.I.V.G. de todo punto inconstitucional:

Alfonso Guerra: “Actos penales, si estaban ejecutados por hombre o mujer, tenían sanciones diferentes

Pero esto está en contra del articulo 14 de la Constitución”.

Es que hay más casos

Ya sé que hay más casos, pero eso no cambia la tipología del delito

No no, la declararemos inconstitucional

Pero al final, constitucional

Pero tú sabes las presiones que recibimos para aprobarla

Pues así, todo. La justicia funciona de vez en cuando, pero cuando esa justicia molesta o se está en desacuerdo con una sentencia, ¡nada hombre!, indultazo y para casa. Y espérate a que no se la indemnice por, digamos, daños intrauterinos provocados por la desfachatez y la maledicencia cognitiva del marido que estaba a 1000 Km de distancia. Total, la han soltado. Y ahora: casa, coche, banda de música y paguita.

Esto sí es cuidar bien a los suyos, de haber sido al revés y el pobre ex marido no hubiera sido italiano, sino Españolazo, le hubiera caído la mundial. Las bilis femi-nazistas se lo hubieran comido con unos fetuccini al pesto y unos raviolis con tomate.

Artículos relacionados