Gobierno requiere a Madrid, Aragón y Baleares crear registro de objetores de aborto
El Gobierno ha realizado un requerimiento formal a Madrid, Aragón y Baleares para implementar en un mes el registro de médicos objetores. La ministra de Sanidad, Mónica García, amenaza con recurso judicial si no cumplen. Isabel Díaz Ayuso rechaza la advertencia y lleva el enfrentamiento al terreno personal.
Enfrentamiento por el registro de objetores
La ministra Mónica García anunció que el Ejecutivo ha realizado un «requerimiento formal» a tres comunidades autónomas. El procedimiento se basa en el artículo 44 de la Ley de Jurisdicción Contencioso-Administrativa. Las administraciones tienen un mes para implementar el registro o alegar motivos. De no hacerlo, el Gobierno planteará un recurso en dos meses para que un juez «les obligue a cumplir la ley».
Respuesta personal de Ayuso
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, respondió llevando el conflicto al ámbito personal. Afirmó: «He sufrido la pérdida de dos bebés» y cuestionó «las lecciones del presidente del Gobierno». Criticó que Pedro Sánchez se dirija a ella «en tono machito». Ayuso ironizó: «Las mujeres hemos pasado de las lecciones del franquismo a las lecciones del sanchismo».
Ayuso mantiene su negativa al registro
La líder madrileña anticipó que no creará el registro de médicos objetores. Defiende el sistema actual de la Comunidad de Madrid basado en «el respeto y el anonimato de los profesionales». Argumenta que este sistema está amparado por la Constitución Española y la libertad de conciencia. Enfatizó que nadie puede ser obligado a declarar sobre sus creencias.
Réplica de la ministra de Sanidad
Mónica García no rebajó el tono y pidió a Ayuso que «recoja cable». La ministra acusó a la presidenta madrileña de mantener una «cruzada contra las mujeres y contra los derechos conquistados». Aseguró que saltarse este procedimiento «vulnera los derechos de las mujeres» y también los derechos de los profesionales que quieren ejercer su objeción de conciencia.
Antecedentes del conflicto político
El Gobierno ha tomado la bandera del aborto tras la votación del PP con Vox en el Ayuntamiento de Madrid. Hace dos semanas, los populares apoyaron una iniciativa para informar sobre un inexistente síndrome postaborto. Este episodio ha abierto un debate interno en el PP sobre la interrupción del embarazo.
Repercusión en el Partido Popular
El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, se vio obligado a posicionarse. Afirmó que garantizará que cualquier mujer pueda abortar con la mejor atención médica y psicológica, conforme a las leyes. Esta declaración se interpretó como una llamada de atención a Ayuso. Sin embargo, la presidenta madrileña mantiene su postura y califica el aborto como «un fracaso como sociedad».


