PSOE percibe fin de la era Sánchez tras escándalos y desánimo interno
La sensación de final inevitable de los gobiernos de Pedro Sánchez se ha instalado en el PSOE. El partido enfrenta el ‘caso Koldo’ y denuncias de acoso sexual en un contexto de parálisis legislativa y expectativas desastrosas para próximas elecciones autonómicas.
Tormenta perfecta de escándalos
Esta semana se produjo una tormenta perfecta. El Gobierno vio estallar la bomba de racimo del ‘caso Koldo’ con detenciones como la de Leire Díez. En paralelo, se activó un ‘me too’ letal para la credibilidad del PSOE con un alud de denuncias de acoso sexual en sus filas.
Dirección debilitada y pérdida de autoridad
Pedro Sánchez ha perdido todo escudo porque sus hombres de confianza han ido cayendo uno a uno, según un dirigente territorial. La renovación de la cúpula nació lastrada por las acusaciones contra Paco Salazar. La gestión de este caso ha provocado un movimiento interno sin precedentes desde 2017.
Antecedentes de una agonía prolongada
Los socialistas comparan la situación con la última legislatura de Felipe González, marcada por escándalos como Filesa o los GAL. La sensación de que todo lo que queda es prolongar la agonía se ha ido haciendo hueco en un partido a merced de su líder.
Cierre e implicaciones inmediatas
El PSOE enfrenta un escenario adverso con elecciones autonómicas próximas y dependencia de Junts para los Presupuestos. La estrategia gubernamental se centra en agotar la legislatura hasta 2027 con medidas populares, pero la sensación de parálisis y desmoronamiento es palpable en Ferraz.


