Boadella afirma que la dictadura fue un estímulo para su compañía
La dictadura franquista supuso un estímulo artístico para Els Joglars. Albert Boadella, fundador de la compañía, explica que burlar la censura dio solidez a su teatro. La comunicación con el público de la época era muy potente.
Ventajas en la adversidad
Boadella señala que las dificultades del régimen le daban fuerza. La compañía fue clasificada en Circo y Variedades, lo que permitió eludir la censura dramática y decir cosas que raramente se decían.
Consecuencias tras la dictadura
El peor momento fue en 1977 con la obra ‘La Torna’. Un consejo de guerra condenó a Boadella, que se exilió tras fugarse del Hospital Clínico. Pagamos el pato dos años después, afirma.
Otros testimonios de la represión
Nani Bejarano Carrasco no pudo opositar a Magisterio por no realizar el campamento de la Sección Femenina. Jordi Petit sufrió bullying y se sumergió en el estudio para ocultar su sexualidad. Mauri García Vecino destaca la falta de libertades de las mujeres.
La censura actual
Boadella advierte sobre la censura de los programadores, que califica como más sutil pero más peligrosa que la de la dictadura. Subraya la diferencia con el público actual, al que define como saturado y resabiado.


