Sánchez aspira a gobernar por división entre PP y Vox
El PSOE maneja un análisis que sitúa la viabilidad de Sánchez en alcanzar el 32% del voto. El presidente mantiene la iniciativa política con temas divisivos para la oposición, mientras las encuestas reflejan un auge de VOX que perjudica al PP.
Estrategia ante la división de la derecha
La dirección socialista analiza la posibilidad de retener el Gobierno si se produce una carambola ideal en la distribución del voto. Este escenario requiere que VOX siga fuerte robando votos al PP, pero sin superarlo, y que una tercera fuerza ultra como la de Alvise Pérez tenga una entrada residual.
Iniciativas para la confrontación
El jefe del Ejecutivo mantiene la iniciativa política con asuntos divisivos para el PP. Aborda temas como la lucha contra el cambio climático y la defensa del derecho al aborto, que permiten la confrontación ideológica y alimentan a la ultraderecha.
Antecedentes de una recuperación
Tras la conmoción por el informe de la UCO que situaba a Santos Cerdán como cerebro de una trama corrupta, muchos dudaban de que Pedro Sánchez pudiera levantar cabeza. En cuatro meses, los sondeos han dado aliento al Gobierno, con los socialistas resistiendo cerca del 30% del voto.
Proyección en el ámbito europeo
En el congreso del PES en Ámsterdam, Sánchez acusó al PP y a la derecha europea de haber tragado todo el paquete de la ultraderecha por miedo. El presidente se erige como bastión frente a los ‘ultras’, afirmando que su Gobierno no tiene miedo y que este desafío les da más fuerza.


