El Congreso rechaza traspasar inmigración a Cataluña y fractura al Gobierno
El previsible rechazo del Congreso a la proposición de ley. La votación evidencia graves divisiones entre los socios parlamentarios del Ejecutivo y complica la negociación de los Presupuestos Generales del Estado de 2026.
Grieta en la coalición de Gobierno
La iniciativa, presentada conjuntamente por PSOE y Junts, generó un enfrentamiento encarnizado entre los aliados. Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) apoyó la medida, mientras que Podemos la rechazó por considerarla «racista». Esta divergencia provocó que ERC acusara a Podemos de realizar «un disparo a quemarropa en la unidad de las izquierdas».
División interna en el grupo Sumar
La aritmética parlamentaria se complicó al partirse el voto del grupo Sumar. Un diputado de Compromís se desmarcó y Izquierda Unida mantuvo la incertidumbre hasta el último momento. Esto mina la posición de Movimiento Sumar, un día después de que la vicepresidenta Yolanda Díaz pidiera un voto favorable.
Antecedentes de un acuerdo incumplido
En La Moncloa se limitan a dar por cumplido el pacto con los posconvergentes, a pesar de que no haya fructificado. Fuentes del Gobierno afirmaron que «las cosas están bien con Junts».
Cierre: Consecuencias para la legislatura
El rechazo a la cesión competencial supone una nueva derrota para el Gobierno y evidencia la dificultad de repetir la foto de la investidura de Pedro Sánchez. La situación embarrana la negociación de los próximos Presupuestos Generales del Estado.


